Otoplastia – Cirugía Estética

Afortunadamente, la otoplastia, también conocida como cirugía plástica del oído, está disponible para alterar cosméticamente las orejas. El procedimiento solo debe ser realizado por un cirujano plástico con experiencia, y puede tener un impacto dramático en la apariencia, la confianza y la calidad de vida general de una persona. Esta cirugía correctiva es extremadamente popular entre adultos y niños por igual. Si le interesan las orejas, o la cirugía plástica del oído, es importante que esté bien informado de todos los detalles pertinentes antes de seguir adelante. Le invitamos a continuar leyendo para familiarizarse con el tratamiento, para que pueda determinar si es adecuado para usted.

La otoplastia, o cirugía estética del oído, se usa para remodelar una o ambas orejas. Los pacientes que no están satisfechos con el tamaño, la forma o la orientación de sus oídos pueden alterar su apariencia a través de este procedimiento ambulatorio. La otoplastia también incluye la reducción del oído/lóbulo de la oreja y la cirugía de la oreja de coliflor para eliminar y recontornar el exceso de piel y cartílago. Debido a que las orejas son muy prominentes, muchos pacientes con cirugía cosmética del oído experimentan un aumento significativo en la confianza y la autoestima una vez que sus orejas han tenido una apariencia más deseable.

Esto se consigue a través de una fragilización del cartílago de la misma oreja y la creación de un pliegue cartilaginoso, retirando el exceso de cartílago y de piel existentes.

Dicha intervención quirúrgica se realiza generalmente bajo anestesia local asistida por sedación endovenosa y con carácter ambulatorio.

Algunos pacientes están más preocupados con el tamaño y la forma de sus orejas que con su protuberancia desde un lado de la cabeza. Una forma de otoplastia conocida como cirugía de reducción de orejas se usa para esculpir orejas más grandes, dando a los pacientes un aspecto más natural.

La cirugía de reducción de orejas, que puede incluir la reducción del lóbulo de la oreja, es un procedimiento ambulatorio y se puede realizar en niños y adultos. Durante la cirugía, el médico eliminará el cartílago y la piel no deseados, y remodelará la oreja para crear un tamaño más pequeño y de aspecto más natural. La cirugía de reducción de orejas puede proporcionar equilibrio y simetría a la cara y las orejas, y a menudo va acompañada de fijación de orejas.

Después de investigar exhaustivamente el procedimiento de otoplastia y encontrar un cirujano calificado, los pacientes prospectivos tendrán una consulta inicial que será crucial para el procedimiento. El cirujano examinará a fondo los oídos del paciente y discutirá varias formas de corregir el problema. La consulta inicial determinará primero si la otoplastia es el mejor procedimiento para el paciente.

Si la otoplastia está indicada como una opción de tratamiento factible, el cirujano discutirá el procedimiento de cirugía de oreja en detalle. Esta discusión probablemente incluirá detalles sobre la anestesia, el historial médico del paciente y los costos asociados con la cirugía. Esta consulta inicial es un buen momento para que los pacientes potenciales investiguen sobre los beneficios de la cirugía de orejas y sobre los posibles riesgos y complicaciones de la otoplastia.

Las orejas son una de las pocas características del cuerpo que las personas no pueden evitar que los vean. El cabello largo a veces puede cubrirlos, pero eso es solo temporal. Son personas tan visibles que regularmente cuelgan joyas de ellos, por lo que cuando alguien se siente incómodo con la forma de sus oídos, a veces puede llegar a niveles insoportables de vergüenza.

Es por eso que la otoplastia, o cirugía estética del oído, puede ser un procedimiento tan popular para muchas personas. Los niños que constantemente se burlan de sus compañeros de clase, los adultos que están hartos de la confianza en sí mismos que se llevan las orejas, o alguien que ha sufrido un trauma en sus oídos, son solo algunos ejemplos de personas que pueden buscar ayuda con la otoplastia.

Por el contrario, algunos niños nacen con defectos graves del oído y también pueden ser excelentes candidatos para la otoplastia reconstructiva.